Abogado de lesiones personales en Laredo

1. Dolor físico. Una víctima lesionada puede recibir una compensación por dolor físico pasado y futuro. El monto de esta compensación se decide a discreción de un jurado. El dolor físico pasado se puede establecer a través del testimonio del lesionado y o inferir de la gravedad del incidente que causó la lesión. El dolor futuro se puede establecer mediante evidencias que demuestren que es muy probable que el dolor físico causado por una lesión continúe en el futuro.

2. Angustia mental. Una víctima lesionada puede recibir una compensación por su angustia mental pasada y futura. Las indemnizaciones por angustia mental se pueden recuperar en la mayoría de los casos de lesiones personales en los que se sufren lesiones físicas. Cuando no hay lesiones físicas, la angustia mental puede seguir alegándose en base a la naturaleza, duración o gravedad de la angustia de la víctima, la cual afecta a su día a día, o mostrando evidencias del alto grado de dolor y angustia mental sufridos, siendo más que mera preocupación, ansiedad, irritación, vergüenza o enojo. Las evidencias para demostrar un alto grado de dolor y angustia mental pueden incluir emociones dolorosas como decepción severa, indignación, orgullo herido, vergüenza, desesperación, humillación pública y pérdida del disfrute de la vida.

3. Desfiguración. La desfiguración se relaciona con lesiones que afectan a la belleza, la simetría o la apariencia de la víctima lesionada o que hace que la víctima lesionada quede deforme de alguna manera. Los daños por desfiguración se otorgan por la vergüenza de la víctima lesionada y la necesidad de ocultar la parte del cuerpo desfigurada. Algunas formas comunes de desfiguración son las amputaciones, cicatrices, quemaduras, extremidades contorsionadas y otras deformidades. El valor de los daños se mide desde la fecha de la lesión hasta el momento en que se espera que finalice la desfiguración.

4. Discapacidad física. La discapacidad física está relacionada con la pérdida de la víctima herida de la capacidad para disfrutar de la vida. Esto normalmente incluye la imposibilidad de disfrutar de hobbies y otras actividades recreacionales.

5. Gastos médicos. Una víctima lesionada puede recibir una compensación por todos los gastos médicos razonables y necesarios incurridos como resultado de un accidente y aquellos a los que razonablemente se enfrentará en el futuro. A menudo se requiere el testimonio de expertos para demostrar que los gastos médicos son razonables y necesarios.

6. Ganancias perdidas. Una víctima herida puede recibir una compensación por ganancias perdidas, como salarios. Por ejemplo, una víctima lesionada que debe estar sin trabajar durante seis meses mientras se recupera de una cirugía puede recibir una compensación por los salarios perdidos durante ese tiempo.

7. Pérdida de la capacidad para obtener ingresos. La pérdida de la capacidad para obtener ingresos se relaciona con la disminución de la capacidad de una víctima lesionada para ganarse la vida. Esto se diferencia de la pérdida de ingresos en que una víctima lesionada no tiene que haber perdido salarios necesariamente. La pérdida de la capacidad para obtener ingresos futuros puede basarse en una combinación de factores que pueden afectar a la capacidad de una persona para ganarse la vida, como los ingresos pasados, el aguante, la eficiencia y la capacidad de trabajar con dolor de la víctima lesionada, sus debilidades y los cambios degenerativos que resultarán naturalmente de la lesión sufrida, así como la esperanza de vida laboral de la víctima lesionada.

8.Pérdida de consorcio. La pérdida del consorcio se basa en la pérdida de amor, afecto, protección, apoyo emocional, compañerismo, cuidado y sociedad que puede ocurrir cuando un miembro de la familia resulta herido. Una reclamación por pérdida de consorcio es derivada de la reclamación presentada por la persona lesionada y está disponible para cónyuges e hijos de la víctima. Un padre puede recibir una compensación por pérdida del consorcio sólo por la muerte injusta de un hijo. La pérdida de consorcio conyugal se refiere a los elementos emocionales e intangibles del matrimonio, incluyendo el afecto, el consuelo, la comodidad, la compañía, la sociedad, la asistencia y las relaciones sexuales. Para determinar el valor de los daños en una reclamación por pérdida de consorcio de un hijo, un jurado considerará la gravedad de la lesión del padre y su efecto en la relación padres-hijos, la edad de los hijos, las características emocionales y físicas, y si otras relaciones de consorcio están disponibles para el hijo.

9. Pérdida de servicios. La pérdida de servicios se diferencia de la pérdida de consorcio en que se relaciona con el desempeño de las tareas domésticas. La pérdida de servicios también es derivada de una reclamación por lesiones personales de la víctima lesionada y está disponible para cónyuges y padre de hijos lesionado.